Cambiar piscina de cloro a sal

Si tienes piscina en casa y estás pensando en convertirla en un espacio de agua salada, con nuestro servicio de venta de agua no potable te facilitamos su llenado de forma rápida, limpia y eficaz.

Hoy te contamos cuánto cuesta cambiar una piscina de cloro a sal y cómo tienes que hacerlo, pero primero, aclaremos, ¿en qué consiste la cloración salina?

La cloración salina es un procedimiento por el cual se desinfecta la piscina sin hacer uso de elementos químicos, lo que la convierte en una alternativa más natural y ecológica.

Este sistema está totalmente automatizado y cerrado, por lo que no se lleva a cabo ningún consumo de sal, a excepción del que se realiza en un primer momento con la ayuda de un clorador salino.

Dicho dispositivo se va a encargar de que la sal circule por el agua y por la célula que contiene electrodos, llegándose a transformar en un desinfectante activo que acabará con las bacterias, hongos y demás patógenos que puedan llegar a acumularse en el agua de la piscina.

Nuestra recomendación es que, junto al clorador salino, se adquiera un regulador automático de pH, por el simple hecho de que las piscinas saladas suelen tener un pH más elevado. De ahí que sea tan importante mantenerlo controlado.

¿Cuánto cuesta cambiar una piscina de cloro a sal?

Para hablar del precio de este proceso, se deben de tener en cuenta varias cuestiones:

    • El precio del clorador salino, atendiendo a su capacidad de producción.
    • El coste de la mano de obra para la instalación. Es recomendable que se lleve a cabo por profesionales.
    • El precio del controlador o regulador del pH (si se decide tenerlo).

Por lo general, instalar todo el equipo cuesta alrededor de unos 1.000 – 3.000 euros. Es evidente que el precio total puede variar según los cambios periódicos que se produzcan en el mercado, la calidad de los dispositivos y los metros cúbicos de la piscina.

Y a este precio, hay que añadirle el coste de la sal que sea necesaria (unos 5 o 6 kg por metro cúbico). Por supuesto, solo servirá la sal específica para piscina y, a ser posible, que sea de alta calidad.

Ventajas e inconvenientes de la piscina con sal

Frente a la cloración tradicional, la cloración salina cuenta con diversos beneficios:

    • Mayor calidad del agua. Con este sistema se evita la irritación de los ojos o de la piel. Y además, tampoco tiene efectos negativos sobre el cabello o la ropa de baño.
    • Respetuosa con el medioambiente. La cloración salina es un tratamiento natural, por lo que se está evitando utilizar productos químicos, conservantes o estabilizantes.
    • Ahorro de tiempo, esfuerzo y dinero. Suele ser más económica al no utilizar productos químicos y su limpieza no ha de ser constante ya que se trata de un proceso mucho más sencillo y cómodo.

Aquí, los inconvenientes:

    • Inversión inicial alta por el clorador salino y el regulador automático de pH (en caso de instalarlo).
    • Aparición de posibles problemas de corrosión en las escaleras. El agua salada puede causar daños en las escaleras si no están preparadas para este tipo de piscinas.

A pesar de los contras, invertir desde el principio en dispositivos de calidad es clave para garantizar una mayor durabilidad.

Ahora que sabes todo esto, recuerda que lo natural siempre es la mejor opción. Así que, ante la pregunta: ¿Piscina de sal o cloro? La respuesta está clara.

No olvides contar con el respaldo de profesionales cualificados. En nuestro caso, podemos ayudarte con el llenado de tu piscina mediante nuestro servicio de venta de agua no potable. Contacta con nosotros ante cualquier duda que te surja.