Factores para medir la calidad del agua

La calidad del agua potable es un tema que en RESVI tenemos muy presente, sobre todo, a la hora de realizar uno de nuestros servicios más demandados, el transporte de cisterna de agua potable.

Y es que, ¿a quién no le gustaría saber si el agua que consume está bien tratada?

Pensamos que es muy importante seguir unos determinados procesos para garantizar la salubridad e idoneidad del agua no solo en el consumo propio sino en cada uno de sus diferentes usos: industria, agricultura, limpieza…

Los parámetros de calidad del agua

Todos sabemos que la calidad del agua desarrolla un papel fundamental en la salud de las personas y en el equilibrio de los ecosistemas. De ahí que sea tan importante tener en cuenta los parámetros de calidad exigidos.

Estos estándares dependen del uso que se vaya a hacer del agua. Por ejemplo, si es para consumo humano, han de cumplirse los criterios de calidad establecidos en el Real Decreto 140/2003.

¿Cuáles son estos parámetros? Primero, sabed que la calidad del agua viene a ser algo así como la identidad de consumo, es decir, engloba una serie de propiedades químicas, físicas y biológicas que serán determinantes para su uso.

Para ello, se hace necesario medir y analizar elementos como la temperatura, el contenido mineral disuelto y la cantidad de bacterias. Estos datos junto a los parámetros de los que hablamos decidirán las buenas o malas condiciones de esa agua.

No hace falta decir que no vale saltarse ningún paso de este proceso, por lo que hay que prestar especial atención al origen del agua (embalses, ríos o pozos), al tratamiento en las ETAP (Estaciones de Tratamiento de Agua Potable) y a la llegada al consumidor a través de las redes de distribución correspondientes.

Aquí, los principales parámetros a controlar:

    • Características físicas: olor, sabor, color, temperatura, pH y turbidez.
    • Características químicas: aluminio, mercurio, plomo, hierro, fluoruro, cobre, cloruro, sulfatos y nitratos.
    • Características biológicas: algas, bacterias, hongos, mohos y levaduras.

Factores que afectan a la calidad del agua

Encontramos los de tipo natural y los de tipo artificial. Los naturales están asociados a las propiedades del terreno y a las características geológicas, por tanto, estos no pueden ser controlados.

Mientras que, los factores artificiales están relacionados con la contaminación y la actividad humana. Normalmente, estas fuentes de contaminación provienen de actividades industriales, urbanas, ganaderas o agrícolas, entre otras.

¿Qué ocurre? El agua puede deteriorarse desde su origen y un mal tratamiento no solo provoca una reducción de la calidad sino que también conlleva riesgos sanitarios.

Si te preocupa no saber si el agua que consumes está bien tratada, puedes utilizar el medidor TDS (Total de Sólidos Disueltos) aunque advertimos que no es del todo fiable, ya que no recoge todas las características que son importantes medir para establecer la calidad del agua.

Eso sí, es un aparato económico y fácil de usar. Es útil  para medir el agua mineral natural y el agua del grifo, por ejemplo.

Ahora que ya sabes todo esto, asegúrate de que el agua que consumes o utilizas está bien tratada. En RESVI nos lo tomamos muy en serio, acude a nosotros si necesitas suministro a través de nuestro servicio de transporte en camión de agua potable. Estaremos encantados de atenderte.